El Premio Juvenil Europeo Carlomagno se concede a aquellos proyectos que promuevan el entendimiento a escala europea e internacional, estimulen el desarrollo de una identidad europea compartida y de la integración europea y sirvan de modelo para los jóvenes que viven en Europa y ofrezcan ejemplos prácticos de europeos que viven en el seno de una misma comunidad.
Los proyectos, que pueden presentarse de forma individual o en grupo hasta el 23 de enero de 2011, pueden centrarse en la organización de diversos actos destinados a los jóvenes, intercambios de jóvenes o proyectos de Internet que presenten una dimensión europea.