El vicepresidente primero del Gobierno regional, Fernando Lamata, aprovechó hoy su visita a una veintena de jóvenes que participan en Toledo en un campo de trabajo organizado por el Instituto de la Juventud con el objetivo de recuperar las riberas del Tajo para reclamar un mayor esfuerzo de todas las administraciones para lograr que el agua que fluye por el mismo esté limpia y el río esté vivo.
Para lograrlo, el portavoz del Ejecutivo autonómico apuntó que es fundamental aumentar su caudal, poniendo fin al Trasvase Tajo-Segura, ya que sólo así el río podrá recuperarse medioambientalmente.
En esta línea, agregó, también es crucial que las administraciones controlen los posibles vertidos que se hacen, ya que es un deber de todos conservar y preservar nuestros recursos naturales, y por último es necesario que se agilicen las instalaciones necesarias para limpiar las aguas que se vierten desde Madrid al Tajo a través del río Jarama.
Una labor de concienciación que también debe hacerse entre la ciudadanía, opinó Lamata, quien puso como ejemplo de esta tarea el campo de trabajo organizado por el Instituto de la Juventud y en el que participan una veintena de chavales de entre 18 y 26 años.
Además de trabajar en la recuperación de las riberas del Tajo a su paso por Toledo, el programa del campo de trabajo también comprende el inventariado y caracterización de los hitos ambientales y paisajísticos existentes en determinados tramos de las márgenes del río.
Con los datos que se recaben en esta última tarea, explicó el vicepresidente primero, se pretende elaborar una guía que se utilizará, posteriormente, para impartir programas de educación ambiental sobre el río Tajo.
Los jóvenes, que hasta el próximo 31 de agosto estarán alojados en el Albergue Juvenil de Castillo de San Servando, realizarán actividades complementarias relacionadas con la educación ambiental, la prevención y extinción de incendios forestales, así como visitas culturales a edificios emblemáticos de Toledo como la Catedral, el Museo de Santa Cruz o la Biblioteca de Castilla-La Mancha, ubicada en el edificio del Alcázar.
Este campo de trabajo es de una las actividades comprendidas en el Programa Verano Joven, gracias al cual más de 4.700 castellano-manchegos de entre 6 y 30 años de edad disfrutan durante los meses de julio y agosto de actividades de Ocio y Tiempo Libre y de Voluntariado en los campos de trabajo de la región, otras comunidades autónomas y en otros países.
El presupuesto de este Programa, uno de los más demandados y que más éxito tiene edición tras edición, supera los 2 millones de euros, detalló Fernando Lamata. Como novedades para este año, se han incluido actividades de naturaleza y acuáticas en Ceuta y Algeciras (Cádiz), mientras que Berlín (Alemania) y Rumanía se han sumado a la oferta de estancias en el extranjero.
Queremos fomentar entre nuestros jóvenes valores como el respeto, la tolerancia, la interculturalidad, el trabajo en equipo o, como en el caso del campo de trabajo visitado, la defensa del medioambiente, argumentó el portavoz autonómico, que estuvo acompañado en el acto por la directora del Instituto de la Juventud, Isabel Rodríguez.
También estuvieron presentes en la visita el delegado provincial de Medio Ambiente y delegado de la Junta en funciones, Manuel Guerrero; el coordinador provincial de Juventud en Toledo, Javier Robles, y el director técnico del campo de trabajo, Carlos Treviño, entre otros.