El director del Instituto de la Juventud, Javier Gallego, destacó hoy el importante papel que tiene para las mujeres jóvenes su formación, para ampliar su nivel de estudios y mejorar sus competencias y oportunidades laborales.
Gallego, junto a la delegada provincial de Trabajo y Empleo, Elena Carrasco, estuvo en la inauguración de las Jornadas de Empleo y Mujer Joven que organiza UGT hoy y mañana en la residencia ‘Alonso Ojeda’ de Cuenca’, donde recordó que una mayor formación inicial puede asegurar el mantenimiento del empleo y facilitar la emancipación de los y las jóvenes de la Región.
El Gobierno regional, a través del Plan de Choque y el Plan por el Crecimiento, la Consolidación y la Calidad del Empleo, establece medidas para favorecer el empleo juvenil, como las bolsas de titulados, la contratación de tecnólogos para proyectos de innovación y el programa de subvenciones de proyectos empresariales de nueva creación.
Además, a través del SEPECAM, se promueven iniciativas como bolsas de titulados para poner en contacto a las empresas y los titulados en Formación Profesional y universitarios de la Región, en situación de desempleo y sin experiencia laboral, para realizar prácticas laborales.
Javier Gallego recordó además que a finales del pasado año se presentó un estudio sobre la situación económica y social de la juventud de Castilla-La Mancha que refleja que la mujer va superando desigualdades a través de esfuerzos como el de ampliación del nivel de sus estudios.
En este sentido, y de forma comparativa, se señala que la situación de desigualdad de la mujer mejora entre las edades juveniles frente a la situación de la mujer de más de 30 años y además, que la mujer joven abandona el hogar familiar con menor edad que los hombres, siendo su principal motivación crear su propio hogar.
Indicó el director del Instituto que el estudio señala la tendencia a que los hombres inicien con una menor edad su actividad laboral, y por tanto, son las mujeres las que tienen un mayor porcentaje de estudios universitarios al prolongar su proceso formativo.
Pese a la situación de crisis y el desempleo, que ha afectado en mayor medida a las mujeres con empleos más precarios y de más baja cualificación, el hecho de que se involucren en su formación y decidan continuar con sus estudios hace que se incremente aún más su cualificación y supongan un valor de futuro para encontrar un empleo de calidad.
Gallego, junto a la delegada provincial de Trabajo y Empleo, Elena Carrasco, estuvo en la inauguración de las Jornadas de Empleo y Mujer Joven que organiza UGT hoy y mañana en la residencia ‘Alonso Ojeda’ de Cuenca’, donde recordó que una mayor formación inicial puede asegurar el mantenimiento del empleo y facilitar la emancipación de los y las jóvenes de la Región.
El Gobierno regional, a través del Plan de Choque y el Plan por el Crecimiento, la Consolidación y la Calidad del Empleo, establece medidas para favorecer el empleo juvenil, como las bolsas de titulados, la contratación de tecnólogos para proyectos de innovación y el programa de subvenciones de proyectos empresariales de nueva creación.
Además, a través del SEPECAM, se promueven iniciativas como bolsas de titulados para poner en contacto a las empresas y los titulados en Formación Profesional y universitarios de la Región, en situación de desempleo y sin experiencia laboral, para realizar prácticas laborales.
Javier Gallego recordó además que a finales del pasado año se presentó un estudio sobre la situación económica y social de la juventud de Castilla-La Mancha que refleja que la mujer va superando desigualdades a través de esfuerzos como el de ampliación del nivel de sus estudios.
En este sentido, y de forma comparativa, se señala que la situación de desigualdad de la mujer mejora entre las edades juveniles frente a la situación de la mujer de más de 30 años y además, que la mujer joven abandona el hogar familiar con menor edad que los hombres, siendo su principal motivación crear su propio hogar.
Indicó el director del Instituto que el estudio señala la tendencia a que los hombres inicien con una menor edad su actividad laboral, y por tanto, son las mujeres las que tienen un mayor porcentaje de estudios universitarios al prolongar su proceso formativo.
Pese a la situación de crisis y el desempleo, que ha afectado en mayor medida a las mujeres con empleos más precarios y de más baja cualificación, el hecho de que se involucren en su formación y decidan continuar con sus estudios hace que se incremente aún más su cualificación y supongan un valor de futuro para encontrar un empleo de calidad.
